
A la gran final llegaron este año los citados Blackhawks y los Philadelphia Flyers -unos clásicos venidos a menos-.
Todo presagiaba que Chicago se llevaría el ansiado trofeo, porque venia más fuerte, pero lo cierto es que la final llegó a empatarse con 2 victorias para cada uno.
Al final, Chicago hizo prevalecer su fortaleza y ganó dos partidos seguidos, convirtiendose en campeón.
Recordemos que la Final de la NHL se juega al mejor de 7 partidos.
Enhorabuena, Blackhawks!!!!!!!
Tiene que estar contento el Obama, je, je.